Historia

El Grupo de Estudio de la Legionelosis (GELeg) nació en 1983 en el Hospital Universitari Germans Trias i Pujol. Miembros de este grupo crearon un laboratorio de investigación de Legionella.
En este laboratorio y a través de diversas becas de investigación se fueron desarrollando y validando técnicas de cultivo, de detección rápida, de subtipaje molecular (monoclonales, PFGE y SBT fundamentalmente), de virulencia de cepas y de sensibilidad antibiótica intracelular. Actualmente se desarrollan además técnicas de genómica y proteómica.
Junto a la dinámica del laboratorio se desarrollaban proyectos epidemiológicos, clínicos, terapéuticos y preventivos que han dado sus frutos en numerosas publicaciones nacionales e internacionales y comunicaciones a Congresos. Al mismo tiempo se incorporaban nuevas personas al equipo y se iba desarrollando el Grupo de Estudio de la Legionelosis (GELeg), adscrito a la Universitat Autònoma de Barcelona y a la Fundació Institut per a la Investigación Biomèdica Germans Trias i Pujol.

Fruto de la creciente demanda asistencial generada en los últimos años debido, entre otros, a la nueva legislación sobre prevención de la legionelosis, a la mayor concienciación sobre esta problemática y al prestigio tanto nacional como internacional de GELeg, este grupo era consultado de forma creciente desde numerosos puntos de la geografía española. Por otra parte, la experiencia en las técnicas microbiológicas y moleculares de Legionella hizo que numerosas empresas privadas y organismos públicos solicitaran sus servicios. El volumen de estos, alcanzado en los últimos años, desplazó la vertiente investigadora obligando a plantear la necesidad de externalizar el laboratorio.

En 2003, nació así AQUALAB, S.L., como «spin off» vinculada a la UAB y dedicada a la asesoría y análisis del agua. Nuevamente, la creciente demanda generada en el ámbito medioambiental y las necesidades de nuestros clientes impulsaron la creación de las áreas de AIRE, SUPERFICIES, ALIMENTOS y la ampliación del área existente de AGUA. Mas recientemente y para cubrir las necesidades ambientales referentes a la COVID se han incorporado técnicas moleculares para el muestreo de superficies, aire y aguas residuales.